Había una vez unos conejitos que eran hermanos.
Uno era macho y la otra hembra.
Caramelo el macho y Piruleta la hembra.
Los dos estaban aburridos. Cuando caramelo vio un circo a lo lejos.
Rápidamente se pusieron en marcha.
Cuando llegaron al circo era diminuto. ¡El circo era de hormigas!
Había un malabarista, un payaso, una acróbata, etcétera etcétera…
Los conejitos tenían un problema: se querían quedar a ver el circo.
Caramelo tuvo una idea: que hicieran la actuación fuera y así fue.
FIN