Érase una vez una niña y un niño que sus sueños de mayores era ser astronautas pero lo que pasaba es que en el colegio siempre suspendieron porque solo hacían dibujos de cohetes, la tierra , astronautas , el sol y muchas cosas más.
Y cuando se hicieron un poco más mayores hicieron un puesto de helados, zumos de frutas y refrescos. Estuvieron vendiendo todas esas cosas durante años y años y años.
Y cuando se llenó su saco de dinero y compraron muchas cosas para hacer un cohete con la ayuda de sus padres. Pasaron días, semanas y meses.
Al fin lo consiguieron.
Ahora se tienen que hacer sus trajes espaciales.
Cuando terminaron sus padres de hacer los trajes espaciales.
Dice la niña llamada Alicia:
-¡Qué ilusión!
¡venga venga! ¡vamos a probarnoslos! Y ahora dice Izan:
-¡Ya voy Alicia!
Ya se los han probado y le están muy bien.
Al día siguiente se montaron en la nave espacial.
Primero le dieron un beso de despedida a sus padres y se fueron.
CONTINUARÁ