Érase una vez una niña que empezó a encontrarse mal.
Conforme pasaba más tiempo peor se encontraba y más le dolía la barriga.
Si madre la tranquilizó pero al rato empezó a tener vómitos y más vómitos…
A la mañana siguiente le llevó al pediatra y le dijo que tenía un catarro pero que le afectaba a la barriga.
El pediatra le dio un medicamento que parecía que era mágico, se le quitaron los vómitos y empezó a encontrarse bien.
FIN