Érase una vez dos hermanos: una niña y un niño que eran nuevos en un colegio.
Todos se reían de ellos día tras día porque llevaban gafas, tenían manga larga en primavera y en verano y en otoño e invierno tirantes.
En sus clases sus compañeros eran muy chulitos.
Ellos estaban todo el día en la biblioteca.
Un día le cayó encima a cada uno un collar. Cuando le cayó un libro en la cabeza a Sofía la niña brillaba mucho y decidieron llevárselo a casa.
Luego desayunaron solos en un banco. Después se rieron de nuevo porque se iban a sus casas en patines y en la bicicleta.
Cuando llegaron a sus casas el libro llegó a las manos de Pablo.
Le dijo a Sofía:
-Vamos a leer.
Cuando leyeron, los collares empezaron a brillar. Cuando dejaron de brillar eran los más guapos del colegio estaban muy contentos tuvieron autógrafos y mucho más.
Fin